Entrevista: “A clases con el celular en la mano”
Artículo publicado en Ediciones Especiales de El Mercurio sobre oportunidades, dificultades y desafíos del uso de teléfonos móviles al interior del aula.
Texto del artículo:
Nuevas herramientas:
A clases con el celular en la mano
Si bien el uso de celulares dentro de las aulas no es algo nuevo, la masificación de los smartphones ha ayudado a aliar la tecnología móvil con la educación.
Publicado: Miércoles, 31 de Agosto de 2011
Hoy en día, la mayoría de los escolares cuenta con un teléfono celular y cada vez más son los que pueden acceder a dispositivos inteligentes con acceso a internet y otras funcionalidades. Es por eso que ya no es extraño encontrar iniciativas que aprovechen esta masificación de los smartphones para fines educativos, dentro de la sala de clases. Es que las ventajas de estos teléfonos saltan a la vista.
Hugo Martínez, director de contenidos digitales de Arquimed, dice que este tipo de celulares pueden ser una herramienta fundamental para la gestión escolar al facilitar la coordinación de acciones, la masificación de información crítica y el acceso a comunicaciones entre estudiantes, docentes y comunidad educativa.
Además, pueden facilitar y potenciar el acceso a fuentes de información o aplicaciones específicas asociadas a recursos para el aprendizaje. “En el mundo de los video- juegos para smartphones es factible encontrar oferta de aplicaciones que podrían ser incorporadas en rutinas escolares asociadas al desarrollo de destrezas o habilidades blandas. Utilizando capacidades específicas de algunos smartphones, como el GPS o el acelerómetro, se pueden desarrollar proyectos de experimentación en el aprendizaje de las ciencias o geografía”, comenta.
Los japoneses
Quienes le han sacado el jugo a este dispositivo son los japoneses. En la escuela Renaissance Academy, un instituto de educación a distancia en Japón, quieren asegurar que el mayor número de personas accede a la educación secundaria.
Para ello, el establecimiento se unió a Qualcomm y están ofreciendo libros de texto digitales para smartphones con 3G, que les permite a los estudiantes acceder al material de estudio independientemente de su ubicación, asistir a clase o hacer exámenes en cualquier momento y lugar a través de los celulares.
“En un futuro próximo, los teléfonos inteligentes y los libros de texto digitales se convertirán probablemente en algo habitual, ya que son unas herramientas perfectas y eficaces para el aprendizaje de estudiantes con distintas capacidades, aptitudes, aspiraciones y estilos de vida”, dijo Takayoshi Momoi, presidente de Renaissance Academy Incorporated, al inaugurar el proyecto.
Experiencia local
En el caso de Chile, recién estamos partiendo. Si bien la mayor parte de los estudiantes en edad escolar cuenta con un dispositivo móvil de comunicaciones, el sector educativo subvencionado muy pocos de los jóvenes cuentan con acceso a smartphones con posibilidades de navegación o intercambio de datos ilimitados.
“Por esta razón, las experiencias de uso de tecnologías móviles en el aula (tablets o smartphones) con intencionalidad pedagógica, están limitadas a proyectos pilotos que aún no logran masificarse en el sistema escolar”, dice Martínez.
Sin embargo, hay algunos casos que vale la pena mencionar. Uno de ellos es el proyecto “Puentes Educativos: Celulares como recurso de aprendizaje”, en que participan más de seis mil alumnos de cien escuelas municipales.
El proyecto, a cargo de Enlaces, apoya el trabajo de los docentes utilizando videos educativos digitales que pueden ser descargados desde un teléfono celular, a través de internet, y proyectados en el aula por medio de un data show.
Además de facilitar estos recursos, realiza talleres semestrales en que se capacita a los docentes en el uso del celular, los recursos educativos digitales e internet móvil, y en el desarrollo de una estrategia pedagógica que apunta fundamentalmente a la planificación sistemática de las clases.
Otro caso interesante es la experiencia del profesor Cristián Romero, que desarrolló un modelo de enseñanza de “Física Móvil” apoyado en juegos de celulares en sala de clases, o lo que hace el profesor Miguel Nussbaum con su equipo de Eduinnova.
Para Martínez, aunque éstas son experiencias piloto, más luego de lo que creemos, existirá disponibilidad masiva de dispositivos móviles con capacidades superiores de comunicación a disposición de la mayoría de los estudiantes del sistema escolar subvencionado.
“Si se unen las tendencias de penetración de esta generación de móviles y la facilidad de adopción con que las acogen las nuevas generaciones, no será extraño que en poco tiempo más la mayoría de los estudiantes cuenten en sus bolsillos con aparatos móviles más sofisticados y con disponibilidad permanente de acceso a información y producción de contenidos”, sostiene el académico.
El desafío
Para Hugo Martínez, la tecnología y sus beneficios saltan a la vista. El desafío ahora es pedagógico. Transformar estas ventajas en una oportunidad educativa es una tarea pendiente, para la cual se deben incorporar diseños didácticos innovadores que articulen las necesidades de cobertura de contenidos, estilos de aprendizaje y el rol del docente con las oportunidades de estos dispositivos”, dice.
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